domingo, 16 de mayo de 2010

"Poner normas a los niños es básico"


Según la psicologa infantil Rocío Ramos-Paúl, los problemas más comunes que intenta resolver hacen referencia al establecimiento de normas y hábitos. De 0 a 3 ó 4 años los problemos son fijar el hábito de comida sueño, y a partir de ahí, entre 6 a 8 y 12, las normas y los hábitos incluido el estudio.

Haciendo referencia a la autoridad de los padres con los niños, sin generalizar comenta, que los padres tienen derecho a equivocarse. El error más gordo es creer que lo haces todo bien y que no tienes que cambiar nada.

Es verdad que los padres consienten mas a los niños frente a la rigidez de otros tiempos, ya que hay padres que no son consecuentes con las normas.

Algunas de las razones son: Tenemos menos tiempo, trabajan los dos, somos más complacientes y preferimos que lo eduque otro. A algunos padres les parece un rollo poner límites y optar por darles lo que quieren y así no oyen al niño sin medir las consecuencias a largo plazo.

Por otro lado, frente al problema de autoridad que sufren los profesores, desde casa lo que podemos hacer es dotar otra vez del prestigio profesional y de la autoridad a los profesores. Después de los padres, ellos son la autoridad que tienen que reconocer los niños. No se puede dar crédito a todo lo que el hijo cuenta sin oír la opinión del profesor; muchos padres llegan a los profesores como toros de Miura diciendo que mi hijo me ha contado no sé qué. Hay que validar la figura del profesor.

Para finalizar, la psicóloga comenta que el niño que con 5 ó 6 años no ha conocido hábitos y límites tiene muchas posibilidades de desarrollar un trastorno de conducta posteriormente. De igual manera el niño que en casa escucha un no, cuando llega a la adolescencia sabe decir también que no.


1 comentario:

  1. Es curioso como lo que se conoce como sentido común escasea en gran manera en los tiempos que corren.
    Lo que nuestros padres y abuelos hacían sin ninguna preparación previa, y no hacian tan mal, hoy en día es una lotería y en según que hogares una utopía.
    Ahí queda eso....!!!!

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